En Largo Domingo de Noviazgo, Jeunet sigue en su línea. La parte de interpretación la asegura con sus actores habituales. La fotografía, como siempre, espectacular, de cuento. Y le roba el compositor a David Lynch para la banda sonora (Angelo Badalamenti, cómo no).
El resultado: un mensaje para los soñadores (que aún quedamos) en el escenario de la Primera Guerra Mundial. Una oda a la esperanza y al amor. Sin rendición.
A pesar de que los numerosos flashbacks dan sentido al adjetivo del título de la película, Jeunet consigue finalmente un bienestar parecido al que te deja Amélie. Digamos que vale la pena el “largo”.
Por cierto, ¿por qué las webs oficiales de películas como La Science des Rêves de Gondry o esta de Jeunet son tan… chulas?
El resultado: un mensaje para los soñadores (que aún quedamos) en el escenario de la Primera Guerra Mundial. Una oda a la esperanza y al amor. Sin rendición.
A pesar de que los numerosos flashbacks dan sentido al adjetivo del título de la película, Jeunet consigue finalmente un bienestar parecido al que te deja Amélie. Digamos que vale la pena el “largo”.
Por cierto, ¿por qué las webs oficiales de películas como La Science des Rêves de Gondry o esta de Jeunet son tan… chulas?
2 comments:
A veces envidio tu faceta soñadora... espero que tus sueños se hagan realidad!
Un beso grande
Well written article.
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